Después de que la población dijera “sí”, el Senado australiano aprueba el matrimonio entre personas del mismo sexo

Casi quince días después de que la mayoría de los australianos votaran “sí” a la legalización del matrimonio entre personas del mismo sexo en Australia, el Senado local aprobó, pese a las objeciones de sectores conservadores, las uniones entre personas del mismo sexo. Ahora, la agenda pasa a votación en la Cámara de Diputados, pero debería tener el mismo resultado. Con el plebiscito que optó por la regularización del matrimonio homosexual, la mayoría de los parlamentarios se comprometió a respetar la decisión de las urnas. En el Senado hubo 43 votos a favor y 12 en contra. La abrumadora victoria fue celebrada por la población y activistas LGBT. Para Penny Wong, legisladora laborista y una de las voces más activas a favor de los derechos de los homosexuales en Australia, la decisión “dice a muchos australianos que este Parlamento, este país, los acepta tal como son”. “Tu amor no es algo inferior, como tampoco lo eres tú”, dice Wong. Si, como se espera, la agenda es aprobada por los diputados, Australia será el país número 26 del mundo en legalizar las uniones entre personas del mismo sexo. También en 2017, el Parlamento alemán hizo historia al aprobar el matrimonio homosexual, a pesar de la opinión contraria de la canciller Angela Merkel. CONSULTA PÚBLICA El 15 de noviembre, a través de una consulta pública encargada por el correo, el 80% de los electores australianos (votar allí no es obligatorio) dieron su opinión sobre si el tema sería aprobado o no en el país. El resultado histórico fue sorprendente y demostró que el 61% de la población está a favor de las uniones entre personas del mismo sexo. Tras la votación, el primer ministro Malcolm Turnbull se comprometió a acelerar el asunto y aprobar la agenda antes de fin de año. “Es inequívoco, es abrumador. Hablaron por millones y votaron abrumadoramente sí al matrimonio igualitario”, dijo Turnbull en un comunicado después de la votación.