Tras sufrir agresión en el Desfile de Búzios, un joven no pierde la pose y hace muecas para tomarse una foto

¡Heridos sí, nunca vencidos!

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Lucas Sobral fue atacado con piedras, puñetazos y patadas tras realizar el 3er Desfile LGBT de Búzios, na Región de los Lagos, en la madrugada del pasado lunes (11).

Audaz y con mucha actitud, el joven decidió tomarse una fotografía para dejar constancia de las agresiones, pero sin perder la pose, la empoderamiento, y por supuesto, el rostro.

 

El joven de 20 años dice que estaba acompañado por su novio, que prefiere no ser identificado, regresando a su casa en una camioneta, cuando comenzó a ser objeto de burlas por parte de un grupo de siete pasajeros.
 

"Estaba recostada en el regazo de mi novio, hablando tranquilamente, cuando empezaron a insultarme: '¡Maricones! ¡Merecen morir!' — dice Lucas, quien asegura haberse bajado de la furgoneta con su novio, por miedo, un punto antes de lo previsto."

 

Sin embargo, cuando llegaron a una panadería cercana a la casa de Lucas, los dos fueron sorprendidos por el mismo grupo de chicos que iban en la camioneta. Uno de ellos, según Lucas, estaba armado.

 

"Intentamos correr, pero mi novio ya tenía mucho dolor en el pie. Por eso volvimos en la camioneta. Corrimos lo más lejos que pudimos, pero cuando miré hacia atrás, lo habían alcanzado. Entonces empezaron los ataques, cometidos por tres o cuatro de los siete hombres que iban en la furgoneta. Estas marcas en mi cara no son sólo de puñetazos, sino también de piedras”, revela Lucas.

 

 

Durante la golpiza, los agresores fueron interceptados por una pareja que detuvo el coche en el que se encontraban para intentar frenar el acto de cobardía. Según Lucas, los asustó el chico que estaba armado.
 

"No sé por qué dejaron de golpearnos. De repente pensaron que habíamos muerto... No lo sé", dice la asistente, que junto a su novio regresó a su casa, ambos muy heridos, registrando el caso. sólo el día siguiente.
 

Después de registrar el incidente en la 127 DP (Armação de Búzios), la policía ahora trabaja con imágenes de las cámaras de seguridad de la región donde ocurrieron los ataques y ya identificó a dos de los sospechosos.

Nuestro más sentido pésame y felicitaciones a Lucas. Está más que bien, cariño, ¡seremos maricones para siempre!