Rômulo Arantes fue uno de los primeros artistas a los que se filtró un desnudo en la web. En 2011, el actor vio viral en las redes sociales un vídeo íntimo, donde aparece masturbándose. Desde entonces, Rômulo libra una batalla legal contra Google, porque la empresa decidió mantener el video, en lugar de eliminarlo, como había solicitado el artista. Después de perder en primera instancia, cuando pidió una indemnización de R$ 250, el actor apeló y ganó el caso, según información del diario O Globo. Según la noticia, el juez Ferdinaldo Nascimento, de la 19ª Cámara Civil de Río de Janeiro, dio dictamen favorable a Rômulo Arantes y condenó a la multimillonaria organización a pagar R$ 10 al artista.