El 22 de noviembre, el tribunal estatal de Río de Janeiro convirtió la unión estable en matrimonio civil de dos parejas de lesbianas.
Cátia Cilene dos Santos y Ana Cristina Soares dos Santos (foto) iniciaron el proceso de conversión hace 2 meses y obtuvieron una respuesta positiva.
Su caso ocurrió en el 2º Juzgado de Familia de Nova Iguaçu, en la Baixada Fluminense, y la decisión fue tomada por la jueza Dra. Mônica. “No tuvimos ninguna dificultad para lograr la conversión. Esto se debe al compromiso de la Dra. Mônica, que entendió nuestra situación y no tiene prejuicios”, dijo Cátia.
La pareja fue una de las que participó de la primera ceremonia colectiva de uniones estables entre personas del mismo sexo promovida por el Gobierno de Río, a través del Programa Río Sin Homofobia, en mayo de 2011.
El camino de Vânia Cardoso de Souza y Antonianne Figueiredo Cardoso de Souza no fue tan fácil. Registraron su unión estable en agosto de 2011, iniciaron el proceso de conversión en noviembre del mismo año y han recibido varias negativas desde entonces. La semana pasada la pareja celebró su nuevo estado civil.
Durante todo el proceso, las dos parejas contaron con el apoyo del equipo técnico -abogados, psicólogos y trabajadores sociales- del Programa Río Sin Homofobia.
“Cada matrimonio civil establecido entre personas del mismo sexo es un logro para la población LGBT. Nuestra lucha es para que todos los gays, lesbianas, transexuales y travestis puedan casarse sin tener que pasar por un proceso. Creo que pronto tendremos nuestros derechos reconocidos, como estados como Bahía y Alagoas”, celebra Cláudio Nascimento, superintendente de Derechos Individuales, Colectivos y Difusos y coordinador del Programa Río Sin Homofobia, de la Secretaría de Asistencia Social y Derechos Humanos del estado . De Río.
