La escuela Kampang, ubicada en el noreste de Tailandia, construyó baños para personas transgénero, luego de que una encuesta mostrara que el 20% de los estudiantes se consideraban transgénero.
Según el director, Sitisak Sumontha, los estudiantes fueron acosados por otros estudiantes cuando utilizaban los baños de hombres. Cuando empezaron a utilizar las instalaciones para niñas, la situación no mejoró.
"Esto causó malestar entre las niñas e hizo infelices a los estudiantes transgénero, lo que comenzó a afectar su productividad en la escuela", dijo el director. Fue entonces cuando la junta escolar decidió instalar los baños, cuya entrada tiene un cartel con un muñeco rosa y azul, mitad mujer, mitad hombre.
"No somos niños. No queremos usar el baño de niños, queremos que sepan que somos transgénero", dijo Triwate Phamanee, de 13 años, que sueña con someterse a una cirugía de cambio de sexo.