Dos largometrajes se estrenan hoy y dan un impulso al clima tibio que se cierne sobre la vida cultural gay en São Paulo. Se trata de la americana Shortbus, de John Cameron Mitchel, y la francesa argentina La León, de Santiago Otheguy.
Mientras el primero abusa y utiliza escenas de sexo explícitas y habla de jóvenes y sus aventuras en un club underground, el segundo se sumerge en la vida solitaria de un joven que vive de la pesca y cortando caña de azúcar en una isla de Argentina.
Álvaro, el joven homosexual protagonista de La León, interpretado por el actor Jorge Román, vive aislado de la gente que vive donde él vive. La única conexión entre su casa y la ciudad es un barco-taxi, llamado La León.
Shortbus es orgiástico. Aunque se proyectó hace dos años, en el 30º Festival de Cine de São Paulo, la película se estrenó con gran repercusión en los medios locales, a pesar de su retraso. La producción entrelaza historias y personajes que, en común, tienen el sexo como causa y solución a sus problemas.
En la película, Shortbus es un club de swing alternativo clandestino. La trama está llena de personajes, sexo gay y muestra una escena de autofelación. Eso es exactamente lo que leíste, el chico intenta practicarse sexo oral a sí mismo. Lo más destacado de la trama es la pareja gay que vive una crisis en su relación, resuelta con la presencia de un tercer elemento.
