PETA, instituto que defiende a los animales, notificó a un estudio de porno gay que utilizó un caimán durante una escena de sexo. Protagonizada por Diego Sans y Kaleb Stryker, la escena se filmó en locaciones de Florida.
El director Marc MacNamara confirmó que el rodaje se realizó en una zona de caimanes y que los actores se acercaron mucho al animal.
La directora de PETA, Elisa Allen, dijo a Gay Star News: “No importa lo que los humanos estén haciendo en el set, los animales salvajes deben dejarse con sus vidas privadas, nunca usarse como accesorios o decoraciones.
“Merecen ahorrarse la confusión, el estrés, el encierro y la exposición a luces brillantes y ruidos fuertes que son inevitables en un set de filmación –y la angustia causada por trasladarlos de un lugar a otro–, razón por la cual PETA propone dejar que todos los directores de cine trabajen. sólo con actores humanos dispuestos”.