Aunque la familia real es muy conservadora, el príncipe William sorprendió y parece dispuesto a cambiar su opinión. Durante una visita a una organización benéfica que ayuda a jóvenes LGBT, el príncipe habló sobre lo que haría si tuviera un hijo gay o lesbiana.
“Comencé a pensar en esto hace poco porque algunos padres me preguntaron lo mismo. Creo que realmente no empiezas a pensar en ello hasta que eres padre y creo que, obviamente, eso está absolutamente bien para mí".