Después del lamentable mando de Marco Feliciano (PSC-SP) en la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara, el diputado Jair Bolsonaro (PP-RJ) espera lograr la misma hazaña. El parlamentario trabaja con el grupo evangélico para convertirse en presidente de la Comisión.
"Estoy cerca de la bancada evangélica y tengo el apoyo del líder de mi partido [Eduardo da Fonte (PE)]. No creo que el PT esté interesado en la comisión. Este es el deseo de una minoría del PT querrán algo más grande", declaró Bolsonaro.
Contrariamente a lo que piensa el diputado, el PT afirmó que la Comisión es una de las prioridades del Partido, que tiene derecho a presidir tres comisiones debido al tamaño de la bancada. El PP de Bolsonaro tiene derecho a dos.
La diputada federal Erika Kokay (PT-DF) dijo a la revista Fórum que el núcleo de Derechos Humanos del Partido de los Trabajadores reforzó la “necesidad” de que el PT retome la presidencia de la comisión para evitar que se repita lo ocurrido el año pasado, bajo la presidencia de Feliciano. .
En cuanto a las críticas, Bolsonaro se mostró despreocupado y confiado en la nueva oportunidad. "Eso no me preocupa. Descarto completamente estas críticas. Siento que ya tengo un pie dentro de la comisión", declaró.
El diputado también dijo que, si la Comisión de Derechos Humanos no se pone del lado de su partido, ya hay otros nombres: Pastor Eurico (PSB-PE) y Marcos Rogério (PDT-RO), ambos aliados de Feliciano.
