En otro espectáculo de terror proveniente de las gradas del Arena Corinthians (SP), el comportamiento de los aficionados brasileños contrastó con el espectáculo de los jugadores en el campo, en el partido entre Brasil y Paraguay (3x0), en un partido válido para las eliminatorias del Mundial 2018 Durante el partido, los aficionados gritaron varias veces la palabra “maricón”, en claro tono peyorativo, dirigida al portero Anthony Silva, de la selección de Paraguay. Se espera que la actitud resulte en un nuevo castigo para la Confederación Brasileña de Fútbol. Durante toda la primera mitad del partido se escucharon gritos al menos en cinco ocasiones. Aún con las peticiones de respeto provenientes del altavoz, y la advertencia de que la actitud podría perjudicar al equipo, la “hincha” continuó con el terrible ejemplo. La FIFA, reincidente, ya había sancionado a la CBF en otras dos ocasiones por mal comportamiento de los aficionados en partidos oficiales. Primero, fue multada con 66 mil reales por los gritos (homofóbicos) en el partido contra Colombia, en septiembre, en Manaos. Al mes siguiente, la triste situación se repitió, en Natal, y el valor ascendió a R$ 83.000. Además de Brasil, otros países también han sido castigados por cánticos ofensivos, como Honduras, El Salvador, México, Canadá, Argentina, Paraguay, Perú, Italia y Albania.
